Divina Liturgia en la Catedral de la Resurrección a las 9.30
La antigua celebración de Pentecostés, desde el momento del descenso del Espíritu Santo sobre los apóstoles, se convirtió en “el día del nacimiento” de la Iglesia de Cristo y también se comenzó a llamar fiesta de la Santísima Trinidad, porque el Espíritu Santo, que había descendido sobre los discípulos, reveló a los hombres un conocimiento mas profundo de Dios, y mas precisamente, el hecho de que Dios, siendo uno en Su esencia, tiene tres Hipostacias. Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo — es un solo Dios en tres Hipostacias.
Tropario, tono 8:
Bendito eres, Cristo Dios nuestro, que has hecho sabios a los pescadores, enviando a ellos el Espíritu Santo, y por medio de ellos has pescado a todo el mundo, Tú que amas a los hombres, gloria a Ti.
Kontaquio, tono 8:
Cuando el Altísimo descendió, confundió las lenguas, y cuando distribuyó las lenguas de fuego, llamó a todos a la unidad, por eso todos al unísono glorificamos al Espíritu Santísimo.