El Icono de Kursk de la Madre de Dios es uno de los más célebres y antiguos de la Iglesia Ortodoxa Rusa, tiene una historia de gran profundidad religiosa y de muchos signos de fe y de milagros, de tal manera que llama la atención la generosidad espontánea de Su divinidad. Después de la Revolución bolcheviques la imágen fue trasladada al Extranjero por los refugiados rusos “blancos” y hasta hoy es Patrono de la Iglesia Rusa en el Extranjero. Desde 1957 se conserva en la Catedral del Signo del Sínodo de los Obispos en Nueva York.
El icono de La Madre de Dios “del Signo” es el término para un determinado tipo de icono de la Madre de Dios (Virgen María), de cara directamente al espectador, representada ya sea de cuerpo entero o mitad de cuerpo, con sus manos levantadas en posición orante, y con la imagen del Niño Jesús sobre su pecho. El icono representa la concepción del Hijo de Dios, Emmanuel, en el seno de la Santísima Virgen María; y este es el mayor milagro, según la profecía del San Isaías, fue la señal para la casa real de David de que no se detendría hasta la encarnación del Hijo de Dios. Pero el mismo milagro de la encarnación del Hijo de Dios fue predicho por otros profetas del Antiguo Testamento; por lo tanto, las imágenes de estos profetas con rollos, que contienen sus dichos proféticos, también se colocan en el icono de “del Signo” de la Santísima Vírgen como su evidencia común de consenso de la verdad de la señal milagrosa dada por Dios a través del profeta Isaías.
Ante el icono del «Signo» de la Santísima Theotokos de Kursk, se reza por la liberación de las luchas intestinas, durante un desastre o la invasión de enemigos, por la curación de la ceguera y enfermedades oculares, el cólera, por la protección y bendición de nuestros compatriotas que se ven obligados a vagar por el mundo.
La representación de la Virgen María con las manos alzadas en oración (“orante”) es de origen muy antiguo en el arte cristiano. En el mausoleo de Santa Inés en Roma, hay una pintura que data del siglo IV que representa a la Madre de Dios con las manos levantadas en oración y el niño Jesús sentado sobre sus rodillas.
También hay un antiguo icono bizantino de la Madre de Dios “Nikopea” del siglo VI, donde la Virgen María se representa sentada sobre un trono y sosteniendo en sus manos un escudo ovalado con la imagen de “Emmanuel”.
Iconos de la Virgen, conocidos como “el Signo”, aparecieron en Rusia durante los siglos XI y XII. Este icono fue muy venerado en Rusia porque los cristianos ortodoxos creen que gracias a él se debe la liberación milagrosa de Novgorod de la invasión de bárbaros en el año 1170.
Hay una serie de diferentes festividades durante el año litúrgico, que conmemoran a la Virgen del Signo. La fiesta principal es el 10 de diciembre en el calendario gregoriano. Otras festividades conmemoran eventos específicos en la historia del icono milagroso.
Muchos variantes de la imágen «Signo» tienen títulos especiales que ayudan a distinguirlos. Algunos de los iconos tienen más de un día de conmemoración, los más significativos son “Kursk de la Raíz” (“Kursko-Korennaya” en ruso), “Chukhloma”, “Abalaka”, “Mirozh” “Pronta para Oír”, “Novgorod”, “Tsárskoie Selo”, “Seraphim-Ponetaevka”.
Historia del ícono de Kursk
El nombre completo de este icono “Kursko-Korennaya” se puede traducir como el Signo de Kursk de la Raíz. Según la leyenda, este icono, que repite la iconografía de los signos de Nóvgorod, se encontró el 8 de septiembre (21 de Septiembre según el calendario Gregoriano) de 1295, no lejos de Kursk en el bosque sobre las raíces de un árbol, por lo que el icono a menudo se llama “de la raíz”.
En el siglo XIII, durante la terrible época de la invasión tártara, casi toda Rusia se encontraba en ruinas y sobre todo la región de Kursk, incluyendo su capital, la cual quedó totalmente destruida por las hordas de Batú Khan dando lugar a la desolación, y sólo existían espesos bosques habitados por animales salvajes.
En este bosque, en el sitio del hallazgo, el cazador quien la encontró, le construyó una capilla, dentro de la cual colocó la Santa Imagen.
Tan pronto los habitantes de los alrededores se enteraron de este acontecimiento, comenzaron a hacer frecuentes peregrinaciones al lugar de la aparición, el cual también se hizo famoso debido a los milagros allí ocurridos.
Dentro de casi 90 años,en 1383 la región de Kursk fue nuevamente sometida a las barbaries de los tártaros, quienes en el camino se encontraron con la Capilla, la cual trataron de incendiar. A pesar de todos los esfuerzos realizados, al ver que la Capilla no lograba quemarse, lo que los enfureció aún más, los tártaros tomaron la Imagen y la partieron en dos, tirándola en diferentes lugares. Cuando más tarde un devoto campesino buscó en los alrededores las partes del Icono, que los tártaros habían tirado, al encontrarlas, las juntó, estas quedaron pegadas y la sola marca que tiene es como si tuviese algo de rocío.
En el lugar donde se encontró el icono, emanó un manantial.
La ciudad de Kursk fue reconstruida en 1597 según las órdenes del Zar Feodor Ivanovich. Este devoto Zar, ahora canonizado como santo, estaba muy informado de los milagros de la Santa Imagen y quería verla, por lo tanto fue llevada a Moscú y para recibirla se hizo una liturgia en su honor en la que estuvo presente el Zar, el Patriarca Job y el Consejo de los boyardos en pleno y el ejército. El Zar ordenó colocar en la parte superior del Icono la imagen de «Dios de los Ejércitos» y a los lados pusieron las imágenes de los profetas que correspondían al Antiguo Testamento. Todo el Icono fue decorado con marco de plata con baño de oro, perlas y piedras preciosas. La Zarina Irina se encargó ella misma de hacerle un velo de bordado con hilos de oro, perlas y piedras preciosas. El Icono fue devuelto ese mismo año, con la ayuda del Zar, a su capilla en Kursk, la cual fue convertida en un monasterio y con una Iglesia, los cuales recibieron respectivamente los nombres de la Iglesia de Natalicio de la Santa Madre de Dios, y Monasterio de la Ermita de la Raíz, en recordación de su aparición sobre la raíz de un árbol. La veneración de los fieles rusos era tan grande, que hasta el «Zar-impostor,» en busca de la comprensión de quienes le rodeaban, dedicó su atención a la Santa Imagen y ordenó sacarla de Kursk y llevarla a su campamento en Putivil y de allí fue trasladada al Kremlin, donde permaneció hasta 1615, Luego por una petición especial de los habitantes de Kursk, el Zar Mihail Fiodorovich ordenó el traslado del Icono a su lugar de origen. En 1618, el Icono fue llevado a la Catedral del monasterio «Známenie» – «Del Signo» en Kursk, donde permaneció durante mucho tiempo hasta la Revolución.
En 1676, el Icono «Známenie» (Signo) fue llevado al río Don para la bendición de los Cosacos del Don. En 1687 los Zares Juan y Pedro el Grande ordenaron llevar el Icono al Gran Regimiento, el cual luchaba contra los tártaros en Crimea, y puso fin a las invasiones de éstos en tierras rusas. En 1812 los habitantes de Kursk enviaron la copia del Icono, enmarcada en plata y oro el ejército del Mariscal Kutuzoff, durante la invasión de Rusia por parte de Napoleón.
El Santo Icono su relación con los Santos y algunos milagros.
Serafín de Sarov
En 1767 se realizó una procesión con el Santo Icono desde el Monasterio de la ciudad de Kursk hasta la Ermita de la Raíz – sitio donde se encontró el Icono. Durante la procesión se desató una fuerte lluvia, que les obligó a buscar refugio, el cual encontraron en la casa de la señora Agafia Fotievna Mashnina, viuda del constructor Isidor Ivanovich Mashnin quien vivía con su hijo Projor (Serafin de Sarov)de 9 años, quien se encontraba muy delicado de salud, casi sin esperanza de vida. El niño había tenido un sueño en el que la Virgen le prometía la curación. Cuando el Icono estuvo dentro de la casa, la señora Agafia llevó hasta él a su hijo enfermo y pronto comenzó la curación de éste.
San Juan de Shanghái y San Francisco
Este Santo Arzobispo entregó su alma a Dios mientras tenía consigo el santo Icono de la Madre de Dios de Kursk.
Explosión en la Catedral de «Známenie» de Kursk el 8 de Marzo de 1898
La veneración de toda Rusia por el Icono milagroso de Kursk llamó la atención de los socialistas revolucionarios, precursores de los bolcheviques. Algunos de estos notables socialistas revolucionarios, con la participación de escritor Maxim Gorky, resolvieron destruir el Icono. Fue preparado un explosivo que debía estallar durante la liturgia que se celebraría en la Semana de la Cruz en la 3º semana de la Gran Cuaresma. De hecho así fue, pero la bomba que había sido colocada debajo el pedestal del Icono no estalló para cuando había sido programada, sino que se activó alrededor de las dos de la madrugada en el momento que la Iglesia se encontraba vacía. La detonación fue tan fuerte que destrozó el techo (de hierro fundido y con baño de oro) que cubría al Icono, el pedestal de mármol donde se encontraba, el portón de la entrada de la Iglesia (forrado en hierro) y las paredes se agrietaron, pero a pesar de todo este desastre el Icono «Známenie» (Signo) quedó intacto, incluso el vidrio que cubría la Santa Imagen.
En 1949, cuando el Padre Georgy Grabbe visitó Frankfurt, llevando al Santo Icono, se le acercó un anciano quien le dijo: «yo fui uno de los participantes en el atentado contra el Santo Icono, era un adolescente y no creía en Dios, quería probar que si Dios existía Él no iba a permitir la destrucción del Icono. Después de la explosión me convertí en creyente y hasta el día de hoy me arrepiento de esa terrible acción.» Luego con lágrimas en los ojos el anciano se inclinó ante el Icono.
El Hurto del Icono por los chequitas en 1918
El 11 de abril de 1918 el Icono y Su copia con todos sus adornos fueron hurtados de la Catedral. Los habitantes de Kursk oraron con profunda fe a la Santa Virgen implorando Su regreso. El Icono estuvo desaparecido durante tres semanas. Un día, cerca del aljibe del Monasterio, dentro de un saco viejo fueron encontrados dos Iconos de Známenie sin los adornos.
El pintor de Iconos G.A. Schuklin quien había pintado la copia, reconoció al Icono original por la marca dejada por los tártaros en 1383. El Icono fue cubierto con un velo de reserva, adornado con plata y esmalte azul, el cual cubre la Santa Imagen hasta la presente fecha. Después de la toma de Kursk por el Ejército Blanco (Guerra Civil 1918-1920) a la orden del General Kutepow fue revisado el edificio de «Dvoriane» (Club aristócrata), donde se estableció la Comisión Especial de la Policía de los bolcheviques (Ch.K.), y en el basurero de ese edificio se encontraron los dos velos bordados de oro, que cubrían los Iconos el día del hurto.
Los Últimos Días del Icono en Rusia y Traslado a la Emigración
Debido a la retirada de las tropas de los Blancos el 31 de octubre de 1919, el Icono fue trasladado del Monasterio de «Známenie» con algunos monjes al Monasterio Oboyan, y continuó su camino hacia Belgorod, Taganrog, Rostow, Ekaterinodar, Novorossiysk. El día 1ro de marzo el Icono salió en el barco «San Nicolay» desde Novorossiysk pasando por Constantinopla a Salónica y al final a la vieja capital de Serbia, Niš. A petición del General Vrangel el Icono regresó nuevamente a Rusia, en Krimea, para fortalecer el espíritu de los combatientes, sin embargo el 29 de octubre de 1920 salió una vez más de Rusia (desde Krimea) con lo que quedaba del ejército y con las personas que emigraron.
Veinticinco años en Yugoslavia
El Icono «Známenie» de Kursk estuvo presente en todas las asambleas de 1er y 2do Concilios de la Iglesia Fuera de Rusia con representantes del clero y laicos en la ciudad de Sremski Karlowzi los años 1921 y 1938. En 1925 se construyó en Belgrado la Iglesia de la Trinidad. Con el permiso del Sínodo y del Obispo Teofano, quien cuidaba la reliquia, el Icono fue colocado allí. Desde ese lugar en muchas ocasiones era llevado a bendecir a los rusos que estaban repartidos por toda Europa. Durante la Segunda Guerra Mundial el Icono trajo consigo muchos milagros, los cuales han sido confirmados mediante testigos, cabe destacar que no solo las tres Iglesia Rusas de Belgrado sino también en aquellas viviendas en donde estuvo el Icono, éstas no sufrieron daños durante los bombardeos. Muchas veces mientras se celebraban las liturgias en la Iglesia de la Trinidad ocurrían los bombardeos y el Metropolitano Anastasio nunca interrumpía las liturgias. La Santa Imagen jamás abandonó a sus creyentes ni defraudó su fe.
Con los Rusos en el destierro
Durante la Segunda Guerra Mundial en Belgrado bajo el bombardeo, ayudó a todos en sus oraciones. Después de la llegada de las tropas Soviéticas a Yugoslavia en 1944 el Metropolitano Anastasio tomó el ícono del Milagro a Viena, luego en Carlsbad, junto con el Sínodo de ROCOR evacuado aquí.
En la Iglesia del Sínodo la Santa Imagen se hizo la verdadera «Salvadora de pobres, protectora de errantes, alegría de los miserables, defensora de los ofendidos, consoladora de todos que acudían a Ella con fe y diligencia», como se canta en el oficio, dedicado al ícono.
En la primavera de 1945, el icono de la Madre de Dios de la Raíz Kursk fue transportado a Múnich, desde donde visitó Suiza, Francia, Bélgica, Inglaterra, Austria y muchas ciudades y campamentos de refugiados.
Tras haberse mudado a los Estados Unidos, la Milagrosa imágen residió constantemente en el Complejo del Sínodo de los Obispos de la ROCOR, que lleva el nombre de su homónimo el monasterio de Kursk, el “Nuevo Desierto de la Raíz”. Ubicado en el desierto de la ciudad de Mahopac, a sesenta millas de Nueva York. La finca fue donada por el príncipe y la princesa Beloselsky a la Iglesia Rusa en el Extranjero en 1948.
Con la bendición del Sínodo de los Obispos de ROCOR, el Icono de Kursk ha sido llevado constantemente a varios lugares de la diáspora rusa. Los californianos rusos en San Francisco mostraron especial celo y reverencia por el Icono Milagroso. Durante las oraciones frente al ícono en la Catedral Dolorosa, se reunieron 700-800 peregrinos. Según la fe de los residentes ortodoxos de San Francisco, aquí ocurrieron varios milagros, como el de una mujer mortalmente enferma de cáncer, quién inmediatamente después del servicio de oración, frente al icono se curó.
El 19 de octubre/1 de noviembre de 1981, en la Iglesia Sinodal del Signo de Nueva York, en presencia del Icono Milagroso del Signo, se realizó la Glorificación de los Nuevos Mártires y Confesores de la Iglesia Rusa.
Y en 2006 en San Francisco, en el IV Consejo de Toda la Diáspora, bajo la Protección del Icono del Signo, se tomó una decisión sobre la tan esperada Reunión Canónica y Reconciliación con el Patriarcado de Moscú.
Viajos del icono a América del Sur
Un año después de la muerte de San Juan de Shanghái y San Francisco, en 1967, el Icono de la Raíz de Kursk llegó por primera vez a América del Sur. El Arzobispo Nikon, Vicepresidente del Sínodo de los Obispos, visitó Brasil y Argentina con el Icono Milagroso. El arzobispo de Sao Paulo y Brasil, Teodosio estaba en ese momento gravemente enfermo, al borde de la muerte, se encontraba en un estado semiinconsciente. Estaba ansioso por la llegada del icono milagroso. El obispo Nikon le hizo saber al obispo Teodosio que iban a entrar a la catedral con el icono, cantarán el tropario e inmediatamente procederán en procesión hacia la habitación del arzobispo, y luego, de regreso a la catedral, realizarán un servicio de oración ante el Icono Milagroso. Frente a la catedral, los clérigos y mucha gente estuvieron esperando a la Santa imágen. Cuando desde la catedral con el canto del tropario de la Madre de Dios con el Icono Milagroso llegaron a la habitación donde se encontraba la residencia del obispo Teodosio, entonces, para sorpresa de todos, el obispo Teodosio se puso de pie, puesta la sotana, en la entrada a su celda. Después de inclinarse fácilmente hasta el suelo, la besó con lágrimas en los ojos. El estado de ánimo bendito que se había creado entre la gente no los abandonó durante todo el tiempo que siguieron los servicios divinos posteriores realizados en diferentes iglesias. Una semana más tarde, el obispo Nikon tonsuró al sacerdote Nikolai Paderin al rango monástico con el nombre de Nicandro, y al día siguiente por la tarde, después de la vigilia nocturna en la Catedral de San Nicolás, el ieromonje Nicandro fue nombrado obispo de Río de Janeiro, vicario de la diócesis de Brasil, en el que también participó el arzobispo Teodosio, que se había recuperado durante estos días.
El sábado 25 de noviembre llegó a la Argentina el Icono Milagroso. El obispo Atanasio lo recibió con el clero y muchos creyentes rusos. Los scouts se alinearon en formación militar, la administración del aeropuerto proporcionó amablemente todas las condiciones para la reunión solemne del santuario. Cuando se realizó la vigilia vespertina, la liturgia y el servicio de oración en la Catedral de la Resurrección, el templo y la calle adyacente se llenaron de gente.
El ícono visitó el colegio ruso en Buenos Aires. Esto causó una impresión fuerte tanto en los estudiantes como en los maestros y las autoridades, la curación de unos de los maestros inspiró a la escuela para seguir trabajando.
La próxima vez que llegó el ícono fue en 1970. Se reunió más gente. Además de Buenos Aires, también fue traída a Santiago de Chile y Montevideo. En su visita de 1972 también visitó Paraguay.
Después de eso, el ícono vino muchas veces a Sudamérica, hasta 2004. Su llegada siempre unía a la diáspora rusa, haciéndoles olvidar las disputas y desacuerdos políticos. Desgraciadamente, después de esas visitas periódicas, por 18 años ya, no hemos tenido la oportunidad de recibir consuelo espiritual en la oración ante nuestro Santuario común. Y todo este tiempo, nuestra diócesis está experimentando las graves consecuencias de las actividades cismáticas de parte de su antiguo rebaño y clero.
Por fin, este año tenemos una gran esperanza a venerar el ícono del Signo en la fiesta parroquial de la Catedral de la Resurrección el domingo próximo después de la Pascua, cuando nos va a visitar Su Eminencia Metropolitano Nicolás, Primado de la ROCOR.
Visitas a Rusia
Después del debilitamiento del régimen comunista en la URSS y las festividades celebradas oficialmente en relación con el 1000 aniversario del Bautismo de Rus’, en 1989 la Iglesia en el Extranjero donó una copia del icono milagroso «El Signo» como regalo a la Ermita de la Raíz en Rusia. Y 20 años más tarde, después de la restauración de la Comunión Canónica entre las dos partes de la Iglesia Rusa, el principal Santuario en el Extranjero llegó a la Madre Patria. Del 12 al 23 de septiembre de 2009, el ícono estuvo en Moscú, en la Catedral de Cristo Salvador, y luego en Kursk, donde el patriarca Kirill de Moscú y Toda Rusia lo recibió él mismo. El 2 de octubre, la imagen milagrosa regresó a Nueva York. Desde entonces, ha visitado repetidamente Rusia y otros países ortodoxos.
Demos gracias al Señor, que nos ha dado este gran santuario, la imagen milagrosa de la Madre de Dios del Signo “Kursko-Korennaya”, que es la bendición de Dios para nuestra Iglesia Rusa en el Extranjero y santifica su camino en el mundo moderno.
Troparion a la Santísima Madre de Dios ante el Icono de Ella «El Signo» Kursko-Korennaya, tono 4
Como un muro invencible y una fuente de milagros / Tus siervos te hemos adquirido, / Purísima Madre de Dios, / derrocamos a las milicias que se nos oponen./ Por eso, te rogamos: /concede paz a tu ciudad/ y gran misericordia a nuestras almas.
Kontakion de la Santísima Madre de Dios ante Su Icono del Signo, “Kursko-Korennaya”, tono 4
Signo de Tu honrosa imagen / celebrando Tu pueblo, oh Madre de Dios, / nos concediste una asombrosa victoria sobre los oponentes de Tu ciudad./ Por eso, con fe, te apelamos: /»Alégrate, Virgen,/ gloria y honor del cristiano».
La Grandeza de la Santísima Madre de Dios ante el Icono de Ella » Kursko-Korennaya «
Te magnificamos, /oh, Virgen Santísima, / y honramos Tu honesta imagen, / por la cual has mostrado / / el signo glorioso